domingo, 27 de mayo de 2012

LA MARCA VALDECILLA (27 de mayo de 2012)



Diario Montañés, 27 de mayo de 2012



Noventa y un MIR han acabado su formación en el hospital de Valdecilla y, tras seis años de carrera, tras superar una exigente prueba de entrada y tras cinco años de prácticas en los que han estado casi siempre dando la cara por sus responsables superiores, la inmensa mayoría de ellos –es el efecto nocivo de los recortes sanitarios en esta generación perdida– encaminan su futuro profesional hacia otras autonomías o hacia el paro.
En la foto de familia para la que han posado antes de la previsible diáspora, aparecen junto a sus profesores y con la responsable política de turno, quien, fiel a lo que ya es tradición, se permitió elogiar a los cesantes con un discurso impregnado de frases hechas en el que puso de manifiesto que «las dificultades excepcionales representan retos excepcionales y necesitan de seres excepcionales para afrontarlas. Y ustedes lo son». Además, todos «llevan la marca Valdecilla, capital social, económico y de prestigio que forma parte del patrimonio emocional de todos los cántabros».
‘Valdecilla despide a sus MIR’, recogía el titular de este periódico, incitando a una segunda lectura, quizá no intencionada. ‘Por tus hijos, por los míos, por todos los jóvenes de esta tierra, tenemos que crear empleo de calidad aquí, en Cantabria’, proclamaba un eslogan de la reciente campaña política. Pero mucho me temo que al paso que vamos, los ahora «despedidos», si deciden quedarse en Cantabria, acaben siendo los camareros mejor preparados para atender al personal de los cruceros, los asistentes ideales para tratar las lipotimias en los funiculares y los caddies más cultos que jamás hayan portado unos palos de golf.
Eso sí, luciendo con orgullo el marchamo de Valdecilla. Al menos mientras sea posible, que con las noticias nada halagüeñas que hemos recibido del gobierno central existe el peligro de que, más pronto que tarde, el prestigio del hospital acabe diluyéndose con la rapidez de un azucarillo en un vaso de agua.

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